martes, 14 de octubre de 2008

2.LA SALUD

Muy a menudo, cuando estudiamos, leemos o hablamos sobre psicología reflexionamos sobre la enfermedad, aunque ahora se habla más bien de trastornos, para alejarnos del concepto de "locura", lo cual es un giro interesante, pues durante siglos la locura ha sido concebida como algo oscuro e irremediable, arrastra un poso negativo que nos atemoriza y nos perturba.

Ahora, sin embargo, gracias fundamentalmente a la investigación, a los avances en los sistemas de ayuda(tanto farmacológicos como en lo que se refiere a la terapia) y a la divulgación, el ámbito del trastorno mental se ha hecho más comprensible y menos terrible, hasta el punto de que no es difícil oir hablar a alguien de sus problemas psicológicos.

Pero quería hablar de la salud, que es un concepto menos conocido y sobre el que muchos podemos opinar. No voy a echar mano de un manual sino de lo que recuerdo haber leído y me viene en primer lugar a la cabeza, aquélla definición de la OMS que específicamente rechazaba la idea de salud mental como ausencia de enfermedad y la equiparaba al bienestar en los diferentes ámbitos: personal, familiar, laboral, social... Aquí está, en inglés, finalmente no he podido reisitirme a buscarla y no ha cambiado:

http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs220/en/

Copio y traduzco:
"Health is a state of complete physical, mental and social well-being and not merely the absence of disease or infirmity." : "La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedad o malestar"

Es una bonita definición y muy útil, pero ¿quién tiene la suerte de poseer ese bienestar?¿es tan común? Me parece una definición utópica, pero las utopías tienen de bueno que establecen aquéllo a lo que se debe tender. De hecho es a lo que se tiende de forma natural, a la búsqueda del bienestar, pero miramos a nuestro alrededor y lo que vemos es otra cosa: prisas, sueño, disgustos, paro, problemas económicos, familiares, laborales, te los encuentras por doquier; digamos que, por ejemplo, poca gente "respira" salud psicológica un lunes en una gran ciudad, sólo hay que buscar en los rostros que encontramos a nuestro paso.

Eso en el mundo occidental, no digamos en los países en vías de desarrollo. De hecho, pensémoslo, conseguir la salud psicológica de todos y cada uno es tan difícil, tan imposible, me temo, como conseguir el bienestar mundial. Así que no es de extrañar que muchos de nosotros pasemos por etapas en las que nuestro bienestar emocional es escaso. Lo cual no significa que, por ello, llegue a aparecer un trastorno crónico y definido. Incluso hay quién se pregunta si nuestra sociedad está ella misma enferma o, más allá, el mundo está enfermo y no parece una pregunta muy descabellada.

La salud o la enfermedad psicológicas también dependen de la definición que de ellas haga nuestro entorno. Así, como me comentaba una psicóloga, los santones de la India serían en nuestra sociedad auténticos esquizofrénicos. Si nuestra sociedad o el mundo están enfermos ¿cómo decir quién está sano y quién no?

Valga, pues, como guía, la definición utópica de la Organización Mundial de la Salud (WHO en inglés), la salud equiparada al bienestar psicológico...hasta donde éste se puede conseguir. Uno puede decir que está sano si, a grandes rasgos, se siente bien consigo mismo, en sintonía con su entorno familiar, laboral, relacional..., emocionalmente estable y, también, razonablemente seguro en lo que afecta a su supervivencia.

1. EL PROPÓSITO DE ESTE BLOG

Este blog se abre con la idea de escribir reflexiones acerca de los muchos temas psicológicos que interesan a la gente, sobre los que a menudo se oye hablar y se consulta. No pretende abarcar todos los conocimientos en este campo, eso sería imposible, sino más bien exponer una visión personal, como psicóloga clínica con años de experiencia en la práctica y con muchas lecturas, congresos, jornadas, reflexiones y publicaciones a mis espaldas.

Actualmente no ejerzo como psicóloga clínica, pero sique siendo para mi un campo que me interesa y sobre el que sigo aprendiendo y reflexionando, a menudo de forma muy crítica. La psicología es una ciencia joven e inexacta, que ha avanzado rápido, pero que, a mi juicio, necesita ser espoleada. Me he cansado de leer en mil sitios las mismas ideas y, diría yo, los mismos errores, repetidos mil veces y mi deseo es divulgar aquéllas que me parecen más útiles o interesantes y profundizar en ellas, pero también discutir el conocimiento ya establecido para hacerlo avanzar.

Trabajé durante diez años como psicóloga en un Centro del Ayuntamiento de Madrid, a destajo, se puede decir, y la confrontación entre la teoría y la práctica provocó en mí, como lo hizo también en algunos de mis compañeros, un sinfín de preguntas, reflexiones y posibles soluciones. De alguna manera, este blog es una continuación de aquél trabajo.

Pero no nos engañemos, es posible que en este blog se recojan más dudas que certezas, pues esto es lo que encuentro cuando le doy vueltas a cualquier problema relativo a la salud y la enfermedad mentales. Igual que es mucho más fácil encontrar debate que acuerdo entre los profesionales de este campo, pues las certezas no son tantas, los puntos de encuentro tampoco abundan, las corrientes divergen y están enemistadas, quizá son irreconciliables.

Este blog está tanto abierto a profesionales como al público en general y su destino dependerá, fundamentalmente, creo yo..., de que pueda seguir adelante con el proyecto que me he trazado.